De Bilbao Seriesland a Rio Webfest

Recuperados ya del fin de semana en Bilbao Seriesland, donde nos lo pasamos en grande, nos toca escribir para dar las gracias por muchos motivos.

En primer lugar gracias al festival, a Oliver y a Rocío (a.k.a. Rose). No sólo por traer el mejor talento desde todos los rincones del mundo hasta Euskal Herria y hasta la humilde villa de Bilbao. Sino también por dar una oportunidad y ponernos escaparate a los pequeños dementes que intentamos hacer cosas en esta tierra, y demostrar así que no hace falta marcharse fuera para encontrar un montón de personas con muchísimo talento y ganas de hacer cosas.

También tenemos que dar inmensas gracias a Rio Webfest, porque nos ha dado un premio con el que ni siquiera podíamos soñar. Morrosko fue premiada como serie vasca más original… y nos vamos a Río de Janeiro!!

Es un logro de todo el equipo: Mikel, Anton, Asier, Álex, Maialen… Y también de todos los amigos que nos han permitido abusar de la confianza para hacerles madrugar el fin de semana y que vengan a echarnos una mano como actrices, actores o figurantes.

Pero vamos al lío. Ya os damos detalles un poco más adelante.

 

El mejor premio: la risa del público

Como ya os contamos en su momento y hemos estado anunciando durante meses, el viernes se presentaba Morrosko en el festival de webseries más importante del Estado. Por la tarde, se proyectó en los Multicines 7. Uno de nuestros mayores temores era que no se entendieran bien algunas partes en las que el humor se basa en particularidades que pueden no darse en otros idiomas o, incluso en otros países en los que también se habla castellano. Pero fue un gustazo comprobar que el público se reía a carcajadas. Y fue un placer aún mayor cuando en el Networking de la noche, personas de Argentina, de Italia o de Austria nos comentaban lo mucho que les había gustado. Ése es el verdadero premio, el que devuelve las fuerzas para seguir creyendo en lo que uno hace.

Urko Sáenz de Buruaga con la invitación a Rio WebfestEsa noche, con viaje en barco incluido, conocimos a un montón de gente de todo el mundo. Profesionales con muchísimo talento y grandes ideas, trabajando en proyectos super interesantes, o con una experiencia impresionante a sus espaldas. Nos lo pasamos tan bien que, aunque no lo teníamos planeado, volvimos el sábado para asistir a la gala de clausura y entrega de premios que se celebró en el Museo Guggenheim Bilbao. Y menos mal que lo hicimos, porque nos llevamos una sorpresa muy grata.

Como ya sabréis si seguís a Morrosko en Instagram o en Facebook, Río Webfest seleccionó Morrosko para que vayamos a Río de Janeiro a presentar la serie!! ¡Todo un honor y un lujazo! Muito obrigado por la oportunidad que nos brindáis!! Ya estamos contando los días para ir a conocer Brasil y a Leandro, del que todo el mundo habla maravillas.

 

Perseguir los sueños

No soy capaz de expresar la ilusión que me hace este reconocimiento. Después de todo el esfuerzo por sacar el proyecto adelante, con momentos realmente duros, por fin obtenemos la recompensa. Nunca he dudado de que el esfuerzo haya merecido la pena, porque conseguir terminar la serie fue ver un sueño cumplido. Pero siempre sabe mejor con el apoyo de los demás.

Una de las secciones de Seriesland se llama Amets (‘sueño’ en euskera). Y eso es lo que hay que hacer: perseguir los sueños, sean cuales sean. Hace un año, por estas fechas, estaba planificando la producción de Morrosko. Con las ideas muy claras, pero también con un poco de acojone, por si, después de movilizar a tanta gente, no era capaz de estar a la altura. Objetivamente hablando, no era más que uno más que había traicionado el sueño que le obsesionó durante años, y pretendía recuperarlo cumplida la treintena. Hace un año, Morrosko sólo era un sueño. Hoy está a punto de viajar al otro lado del charco. Todavía queda mucho por recorrer, pero ya vamos dando pasos.

No puedo terminar el post sin acordarme del increíble equipo de la webserie El Himno mundial, una buena muestra de loque comentaba antes sobre lo cerca que tenemos gente con un potencial impresionante. No nos conocíamos y tuvimos la suerte de pasar mucho tiempo juntos durante el fin de semana. Espero que coincidamos muchas veces, porque da gusto compartir el tiempo con compañeros/as tan agradables, tan atentos/as y con tanto talento y tanto entusiasmo. Darán mucho que hablar, estoy seguro.

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